«Eran muchachos buenos y llenos de vida»

«Eran muchachos buenos y llenos de vida». Habla el párroco de la comunidad San Bartolo de Berrios en la que fueron asesinados siete jóvenes que celebraban el ‘Día de la Madre’.

“Estábamos recogiendo las sillas y los manteles del evento en honor a la Virgen. Ya solo quedábamos los servidores cuando comenzaron los balazos. Nos tiramos al suelo. Al salir, estaban los papás llorando. El dolor ahí, presente, brutal”, indicó al periódico Milenio el párroco de la iglesia Santa María Guadalupe y que fue testigo de la tragedia.

El sacerdote José de Jesús Pérez lleva casi siete años al frente de esta comunidad. que los jóvenes eran buenos y llenos de vida, dijo que los conocía bien que a unos los vio crecer y a otros los conoció a través de sus padres.

«Eran jóvenes que iban a las pascuas, felices donde trabajábamos también con ellos, como se pueden ver aquí todos los jóvenes que tenemos en la vida pastoral luchando por ellos precisamente para rescatar de todo esto que se vive», aseguró Pérez.

Familiares, amigos y habitantes de la comunidad de San Bartolo de Berrios, en el municipio de San Felipe, se reunieron este miércoles para velar a los siete jóvenes que fueron asesinados la madrugada del pasado 19 de mayo.